Cuando nuestra antigua alumna Mara Costa, una artista realista y autodidacta, comenzó sus estudios en Clonlara, se sintió un poco “desplazada”, así que pasaba el tiempo leyendo y dibujando. “Pasaba horas interminables dibujando”, dice, “sin prisas, sin exigirme nada, sin expectativas de mí misma ni de los demás”.
Pronto descubrió que la flexibilidad de su horario en Clonlara le daba tiempo para crear poco a poco, observar con atención y reflexionar profundamente sobre su trabajo. “Analicé inconscientemente qué estaba mal, qué había que mejorar”. El resultado fue una asombrosa evolución de sus habilidades en muy poco tiempo.
Experimentando el flujo
Cuando lees un libro hasta bien entrada la noche, practicas un saque de tenis miles de veces o, como Mara, dibujas con lápices durante horas y horas, puedes perder la noción del tiempo. El autor Mihály Csíkszentmihályi describió esto como la “ experiencia de flujo ”, un estado mental concentrado en el que uno se sumerge por completo en una actividad. Es una “experiencia óptima”.
“Aprender algo que realmente me gusta y me interesa es muy divertido», dice Mara. «Aprender algo que no me interesa tanto me parece una pérdida de tiempo». Entonces, ¿cómo pueden los estudiantes experimentar un aprendizaje que les resulte más atractivo, incluso cuando el tema no les interesa? La respuesta de Mara es muy sencilla: ¡empieza por la curiosidad!
“Siempre traté de encontrar un tema que me interesara dentro de lo que necesitaba aprender. Me di cuenta de que siempre existe una curiosidad que se debe satisfacer estudiando un tema”.
El don de recuperar el tiempo
Como estudiante del programa Off-Campus de Clonlara, Mara tuvo la flexibilidad necesaria para perfeccionar y desarrollar sus habilidades artísticas. Cuando le preguntamos cómo había mejorado tan rápidamente y de forma tan espectacular, respondió: «Tiempo. Tiempo y dedicación. Cuando aprendemos según el programa de otro, nuestras tareas se reducen y el tiempo está contado y predeterminado por otros».
Los padres de Mara estaban felices de darles a ella y a su hermano la oportunidad de aprender de una manera diferente a través de Clonlara, ¡especialmente porque significaba que podían pasar más tiempo juntos! “Siempre disfrutamos estar juntos, y en una escuela pública ese tiempo se limitaba a una o dos horas al día y un fin de semana que pasaba volando”.
Cuando aprender se siente como jugar
Mara se describe a sí misma como una niña de voluntad muy fuerte, por lo que incluso cuando se le pedía que trabajara en temas que no le interesaban, siempre era capaz de encontrar una manera de hacerlos “suyos”.
«El mayor cambio que noté después de cambiar al enfoque de Clonlara fue la sensación de no “trabajar” nunca de verdad. Al contrario de lo que sentía antes, empecé a sentir que jugaba con los temas que me gustaban y los exploraba de una forma sencilla y, a menudo, divertida».
El aprendizaje es un viaje personal
A menudo asumimos que un estudiante necesita un experto que le enseñe habilidades especializadas. Sin embargo, como explica Mara, no es necesariamente imprescindible encontrar un maestro.
«Entiendo perfectamente ese miedo a no ser capaz de aprender sin un guía. Lo sentí mucho cuando me uní por primera vez a Clonlara», admite. «Con el tiempo me di cuenta de que, cuando elegimos un tema que nos gusta, no necesitamos la voz de otra persona que nos guíe en el aprendizaje. Podemos hacer cursos, leer libros, observar, hacer pruebas, equivocarnos y entender cómo hacerlo correctamente».
Aunque Mara investigó a otros artistas para entender los materiales que utilizaban, señala que sus habilidades crecieron cuando decidió dedicar tiempo y paciencia al arte de observar una obra de referencia y reproducirla.
«A partir de entonces —dice—, el viaje fue enteramente mío».
Consejos para estudiantes autodirigidos
Dejarse llevar por la curiosidad puede resultar un poco desconcertante al principio. «Quien inicia un viaje de autoaprendizaje se da cuenta de que no es tan romántico como parece», explica Mara. Los estudiantes autónomos supervisan la dirección que toman, por lo que pueden encontrarse con obstáculos y dificultades inesperados.
Mara se enfrentó a momentos en los que se sentía sin inspiración, desanimada y sin rumbo, lo que a veces la llevaba a «bloquearse creativamente». En esos momentos, se enfrentaba a sus sentimientos con preguntas. «Me preguntaba si realmente me gustaba lo que estaba haciendo o si solo estaba continuando una rutina que había seguido durante mucho tiempo».
Para ayudar a sus compañeros a sortear obstáculos sorprendentes, Mara tiene tres grandes consejos:
- No te aísles. Siempre que puedas, estudia en compañía, pide ayuda, busca tutores, amigos, profesores. No dejes que tu estudio individual se convierta en soledad.
- Administra tu tiempo. Sigue tus pasiones con un horario, no dejes que el estudio o el trabajo ocupen todo tu tiempo. Es muy, muy, muy importante mantener un buen equilibrio entre estudio/trabajo y placer. Tómate tiempo para leer de forma recreativa, para salir a caminar, para ir a ver el mar o las estrellas, para ver una película o para hacer lo que te haga feliz. Encuentra un equilibrio entre todas las partes de tu vida que tengan sentido para la etapa que estás atravesando.
- No pasa nada por ser diferente. Al principio, cuando tenía que explicar a la gente de mi entorno el nuevo colegio al que iba y cómo funcionaba, diferente a lo que estaban acostumbrados y conocían, me sentía incómoda y quizá un poco avergonzada. Ahora lo veo completamente absurdo, pero en aquel momento era complicado. Todas las personas llegan a un punto en sus vidas en el que toman caminos completamente opuestos y, aunque sea difícil de procesar, ¡siempre es una gran señal! La diferencia es lo que te hace evolucionar y seguir adelante.
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La inspiradora historia de Mara demuestra cómo la experiencia educativa puede transformarse cuando se les da a los estudiantes la oportunidad de seguir con entusiasmo sus pasiones y participar con un propósito en su aprendizaje. Para ver más de su arte e incluso inscribirse en sus clases de arte, sigue a Mara en Instagram .
Si tuvieras la oportunidad de seguir tu camino de aprendizaje ideal, ¿qué elegirías estudiar o practicar?
